El microscopio espiritual

El mundo espiritual es un mundo de fuerzas que actúan siguiendo leyes, algunas de las cuales comprendemos, mientras que algunos aspectos de ellas siguen siendo desconocidas, lo mismo que las ciencias convencionales que exploran la naturaleza de este mundo.

Entendemos algunas partes del mundo espiritual mientras que otras permanecen ocultas.

Debemos emplear un enfoque estrictamente científico y serio al investigar la espiritualidad, como lo hacemos al estudiar la naturaleza física. Lo que está oculto ahora, se revelará el día de mañana. La ciencia de la Cabalá nos proporciona los instrumentos de investigación que podrían equipararse a un microscopio dentro de nosotros, que podemos utilizar para estudiar las fuerzas espirituales, las fuerzas de otorgamiento.

Sin embargo, debo tener la fuerza del otorgamiento para medir estas fuerzas, para estudiarlas y discernirlas. El ser humano interpreta todo el conocimiento y las experiencias que recibe a través de él mismo.

Después de que desarrollo mis fuerzas de otorgamiento, las ajusto, como lo haría con un microscopio muy sensible, para penetrar en la profundidad de la materia (el deseo) en donde observo diversos fenómenos (de recepción y otorgamiento), de acuerdo a la sensibilidad de mi vasija de percepción (Kli).

En cualquier ciencia nosotros realizamos la función de un instrumento, porque a final de cuentas, somos nosotros que recibimos el conocimiento y hasta cierto punto lo hacemos subjetivamente. Pero cuando estudiamos la ciencia de la Cabalá lo hacemos conscientemente y nos convertimos en un instrumento de investigación. Sin embargo, el estudio mismo debe ser puramente científico. Nuestra investigación se vuelve objetiva pues nuestra naturaleza nos impulsa a ser objetivos.

En muchas ocasiones los cabalistas dijeron: “Por Tus acciones Te conoceré”. “Conoce a tu Creador y sírvelo”. “Pues todos Me conocerán desde el más pequeño hasta el más grande”.

En todo el universo hay solamente dos fuerzas, dos atributos: la Luz (el atributo de otorgamiento), y el deseo de disfrutar (el atributo de recepción). Todo lo demás se  deriva de ellos.

Lo mismo se aplica a las matemáticas: hay un cero y un valor diferente a él. Todo lo demás se desprende de estos valores y es sencillamente una cuestión de cálculo. La física es lo mismo: hay dos fuerzas que son distintas una de otra.

Lo anterior se aplica también a la Luz Superior. Cuando aparece un punto, un poco más oscuro que la Luz, tenemos dos propiedades diferentes. Allí es donde empieza el progreso y surge la ciencia de la Cabalá.

Cómo en cualquier otra ciencia, la Cabalá estudia las discrepancias entre dos fuerzas (fenómenos). Esto es posible aumentando las diferencias entre ellas con la ayuda del microscopio (análisis), o encontrando puntos de conexión (síntesis).

Toda la ciencia se basa en descubrir las interacciones entre dos fuerzas: el Creador (el otorgamiento) y la creación (la recepción) en todos los niveles de su manifestación en el deseo (la materia). Es imposible identificar y estudiar una fuerza sin la otra. Por eso, por medio del análisis y de la síntesis, estudiamos la interacción entre ellas y de aquí llegamos a ciertas conclusiones. «No existe el Creador sin una creación y no existe la creación sin el Creador«.

Por eso es una equivocación considerar solamente una fuerza y no conduciría a conclusiones científicas, sino más bien a deliberaciones sobre una forma abstracta.

Cuando digo: «El atributo de otorgamiento»: ¿A qué me estoy refiriendo? ¿Qué es? ¿A quién le otorga? ¿A quién influye? ¿Dónde están sus manifestaciones? ¿Cómo sé que es otorgamiento? Las respuestas son: entendiendo al opuesto.

Puedes ver la diferencia únicamente al comparar los opuestos, al estudiar quién es el que recibe. No podemos sencillamente decir que algo es positivo, porque en relación a qué es positivo. ¿En dónde está el negativo?

En otras palabras, no puedes discernir algo por sí mismo; lo puedes hacer solamente en relación con algo más. Todo el fundamento de cualquier ciencia radica en las comparaciones. No existe en el universo nada más que estas dos fuerzas.

Por eso observamos este enfoque estrictamente en la ciencia de la Cabalá. Y si tú te alejas de la materia y de la forma que define a la materia, se convierte en misticismo.

Extracto de la lección “la característica de la Cabalá” de 13/12/09